¿Estás pensando en instalar una caldera de gas en casa? Antes de tomar la última decisión, ten en cuenta estas consideraciones.
Si llevas un tiempo valorando todas las posibilidades del mercado y, finalmente, te has decantado por instalar una caldera de gas en casa, has tomado una buena decisión. Pero para que todo salga a pedir de boca y aumentes el comfort térmico dentro del hogar vas a necesitar cumplir una serie de requisitos. El primero, ponerte en manos de instaladores profesionales como los que forman parte del equipo de I3C. El segundo, conocer a fondo todas las exigencias y las posibilidades de estos sistemas de climatización.
Después de leer nuestro post sobre las ventajas y los porqués de las calderas de condensación (más allá de la obligatoriedad legal), ha llegado el momento de proponérselo definitivamente. Conociendo al detalle lo que se necesita para instalar una caldera de gas y comprobando si tu casa cumple con los requisitos, podrás ponerte en contacto con nuestros técnicos para proceder al cambio.
¿En qué te debes fijar para instalar una caldera de gas? Mínimos necesarios
Una de las primeras preguntas que debes responder cuando te planteas dar el salto a una caldera de gas guarda relación con la instalación de gas. ¿Tiene tu casa, tu edificio o tu zona geográfica acceso a red de distribución de gas natural? Si la respuesta es negativa, puedes seguir conociendo estos requisitos, pero tendrás que buscar otras alternativas.
Una vez superada esta primera barrera, y con la acometida de gas realizada y accesible, llega el momento de tener en cuenta el resto de mínimos necesarios para instalar una caldera de gas con todas las garantías de eficiencia y satisfacción:
- Ubicación. Esta es una de las decisiones básicas más importantes a la hora de realizar la instalación. Se necesita una estancia con acceso a las tuberías de gas y agua y, además, con unas dimensiones de al menos 4 m2 y de más de 2 m de altura.
- Ventilación. La habitación, además de ser amplia, tiene que estar bien ventilada para favorecer la renovación del aire. Esto se consigue colocando rejillas en puntos estratégicos que conecten el interior y el exterior de la vivienda y, al mismo tiempo, permitan la salida de aire e impidan la entrada de olores y humo.
- Tuberías y demás conductos. Para instalar una caldera de gas, es necesario asegurar el acceso al combustible y la entrada y salida de agua. Para ello, es importante revisar el estado de los conductos (aunque sean nuevos). De ellos dependerá el buen funcionamiento de la caldera tanto a la hora de proporcionar ACS y calefacción, como a la hora de expulsar humos.
- Tipo de caldera. Las de condensación son las únicas permitidas en obra nueva. Pero las atmosféricas o las estancas aún pueden colocarse en casos concretos. Lo mejor es consultar a profesionales como los que forman parte de I3C y dejarse guiar por sus recomendaciones.
- Proceso de instalación. Es el último de los requisitos clave a la hora de instalar una caldera de gas. En este momento, tan importante es contar con un técnico especializado en este tipo de obras como haber tomado la decisión idónea con todos los detalles anteriores.
No lo dudes, antes de cometer un error en la elección e instalación de tu caldera, pide consejo a profesionales especializados. De la mano de técnicos como los de I3C, podrás disfrutar de todas las ventajas del gas natural en tu hogar.
